domingo, 17 de junio de 2012

Crónicas de un sueño 2


     Este sueño desde donde lo recuerdo empezó tras un breve inicio que no tiene nada que ver, a lo Sket dance...que me lo saltaré e iré directo a lo importante, al acontecimiento de los zombies.

   Todo comenzó como si de un videojuego se tratase, Iván, un amigo jugaba a un juego de zombies en el cuál se encontraba en una situación difícil ya que aunque hubiesen pocos enemigos, se encontraba entre 2 autobuses en plena calle, se adelantó entre la masa de no muertos como pudo hasta que encontró una escopeta, pero en ese momento, el sueño dió un giro, él y yo estábamos en esa situación rodeados por ambos flancos de enemigos, no sabíamos que hacer, si nos mordían nos infectarían, asi que decidimos arriesgarnos y salir hacia delante golpeándolos de una manera muy poco factible. Tras un unísono golpe de luz llegamos a un refugio, en el que a primera vista se podía observar que el paso al mismo nos lo bloqueaba una doble alta verja de alambres, de un potente soporte, entre ambas unas personas de rostro no reconocible en mi vida real se sitiaban en el centro, fusil en mano de manera inmóvil. Solteamos desesperados la primera barricada y nos dispusimos con el mismo ímpetu con la segunda, pero unas manos, unas vivas manos nos aguantaron, según ellos, la muralla estaba electrificada en medida defensiva, unos zombies saltaron la primera barricada, pero allí se encontraban esos guardianes para neutralizarlos y en muy poco tiempo nos abrieron las puertas hacia lo que nosotros querríamos llamar....hogar.


   La primera visión que recuerdo del sueño al entrar en el refugio, es una vista algo turbia, no la recuerdo con exactitud aunque en aquel momento fuese de día y con un sol bastante potente que nos insidiaba sobre nuestras cabezas, se veía un ambiente algo animado en este lugar, la gente paseaba de manera casual y gozaba de una tranquilidad plena, aunque yo no podía decir lo mismo, mi cabeza volteaba hacia la puerta para asegurarme de que ningún ser maligno sobrepasaba esas murallas que nos proporcionaba la seguridad. Lo primero que se encontraba en este refugio; en la entrada al aire libre es un patio enorme donde al final se contemplaba unas casas con un estrecho pasillo abovedado a izquierda del mismo que daba paso a un patio más estrecho en la parte trasera del refugio, todo amurallado para salvaguardar la seguridad.


   Anduve por el recinto para observar cada rincón, recuerdo mucho de ello, sobre todo la parte trasera, pasando por el pasillo abovedado, en el cual terminaba de una manera MUY irracional, puede que esto sea el indicio que me hizo sospechar que fuese todo un sueño. Situándonos nada mas salir del pasillo que daba luz al patio trasero mirando a la derecha, una simple cadena de metal nos aseguraba toda esa protección de una extensa ciudad que se perdía en el horizonte, las carreteras se entrecruzaban y se perdían entre los grandes edificios de metal y cristal como si de colosos se tratasen. A su derecha, solo una muralla que me llegaba a la cintura tras la cual observé una profunda trinchera que se hundía en el terreno haciendo factible la protección. Lo mas irracional de todo es la parte sur, ya que no había nada, un escalón que solteabamos con una zancada nos hacía adentrarnos en esa jungla de ciudad infectada de no muertos, zombies por doquier amenazaban la vida de cualquiera que se acercase a ellos. Dejando de lado estos absurdos detalles y pensando que en el sueño esto se trataba de algo realmente placentero y efectivo.


     Una vez vi aquellos errores, dejando de lado a mi compañero que se encontraba en otro lugar, charlando quizás o explorando de la misma manera que lo hacía yo. Observé que unas puertas estaban completamente abiertas en 2 edificios situados de manera conjunta uno junto a otro. Le pregunté a un niño que correteaba por allí si se podía entrar y el me respondió con una afirmación. Según su aclaración se trataban de los dormitorios, por lo que podía observar, vivían en una especie de comuna, todos ayudaban a todos. Me adentré en una casa, no había absolutamente nadie dentro, la habitación se componía de varios sofás y sillones muy bien tapizados, al final del mismo, tirando a la izquierda contemplé que se alzaba una puerta sellada con unos barrotes de metal a través de unos candados, supuse que se trataba de una salida de emergencia por si había algún problema de evacuación por la puerta principal. En el siguiente edificio solo asomé mi cabeza, pero de la misma manera que la anterior, solo observaba el inmueble.


   Tras todo esto, a groso modo había contemplado todo el refugio, me parecía fantástico, me alegraba de haberlo encontrado. Durante mi emoción, una hilera de personas se entornaban sobre un hombre de edad mediana, grande y ancho, con una melena y barbas exuberantes y plateadas, comentaba cosas como:


    - Quién muestre indicios raros o algún fenómeno fuera de lo normal que active la señal de emergencia


   A mi vera un chico tosía y andaba cojeando de manera retorcida, me alarmó bastante, alcé el brazo y comenté sobre las condiciones del muchacho, pero no me hicieron caso alguno. Ya podía asegurar y dar por hecho evidente que era el manda más del lugar, la figura de liderazgo de los supervivientes que se alojaban aquí; tras el discurso las personas allí presentes se separaron a sus quehaceres personales.

   Observé tras la muchedumbre que unos chavales, de mi edad, sobretodo 2 chicas que andaban juntas me miraron y siguieron adelante, una de ellas muy atractiva con pelo corto castaño y piel bronceada, de cuerpo perfecto para la excitación del hombre, o mejor dicho, desde mi punto de vista. Intenté conversar con ella, ya que era nuevo y no conocía a nadie, acto seguido se burlaron de mi ser y siguieron con su camino. Pasé de ellas y tras eso se me difumina los recuerdos del sueño hasta situarnos en el mismo lugar pero volteándome de nuevo hacia el patio interior donde observé que el chaval con mal aspecto se encontraba fuera de esa muralla, en la carretera, se retorcía de dolor, tosiendo sangre y gritando. Un espectáculo muy poco afable, me sentía fatal por el joven desconocido, algunas de las personas del recinto se sitiaron en un lugar a contemplar la "zombificación". Sólo pensé en que si ese se transformaba en uno estando aquí dentro, todos estábamos en peligro.


   Otra neblina se apoderó de mi sueño hasta llegar a un punto en el cual me sitiaba en el patio central, de nuevo a la luz del día junto a otro amigo mio, Manolín. Estuvimos hablando de algo que no recuerdo y le acompañé a un mercadona, no conocía el camino, pues solo recuerdo que me encontrase dentro, como si también fuese parte del mismo refugio. Una vez alli fué a por provisiones para su novia, según me comentó él. En la parte de los congelados, absurdamente vió pan de molde empaquetado pero de una manera descomunalmente grande, rió de ello y siguió con sus compras, yo cogí un dulce pero enseguida vi el precio, de 3 cifras se componía en en menos en 1s lo volví a dejar en su lugar. Tras las compras y en medio de todo el tugurio de gente, nos encontramos de nuevo con Iván, él cojeaba, pero nos aclaró que no era por nada preocupante, sino porque se había doblado el tobillo. Esa misma noche un clic sonó en mi mente, me di cuenta de la enorme falsa que era este refugio y que algo asqueroso se cocía aquí dentro, llamé a Manolín y lo guié hasta una pequeña estancia en la cual podríamos conversar sin que nadie lo supiera, Iván nos siguió en plena penumbra, quiso enterarse pero me rehúse y se volvió algo indignado hacia su habitación. Manolín preocupado me preguntó por lo que pensaba y le contesté lo siguiente:


  -Aquí, nada bueno existe, el culpable de que haya gente que se zombifique está en las manos del líder- me refería a aquel sujeto ancho y robusto de mediana edad- este hombre nos engaña, las pruebas de nos hace cada semana en la que nos extrae sangre para asegurar que no estamos infectados, es falsa. Nos inyecta la misma aguja que la de los infectados, todos estamos infectados, sobrevivimos por el suero que nos echan en la comida. No quise que Iván entrase porque noto en su rostro que ya no durará a mañana....-me lamenté por él pero nada era posible para salvarlo, nosotros en cambio teníamos como 2 semanas de vida a este paso, ya que el suero era a cada dosis menos eficaz. Nos tenía contra las cuerdas, estábamos a su completa merced.


   -¿Qué pretendes?
   - Matarle...al amanecer-le respondí con decisión.


   A la mañana siguiente un caos reinó en el refugio, la mayor parte de la gente estaban zombificada y la restante en pánico por buscar un refugio. El líder se enteró de nuestros planes y nos persiguió como de un zombie se tratase, corrí hasta una habitación donde Manolín cerró de golpe la puerta arrancándole de lleno el brazo a su paso. Huimos y nos escondimos estratégicamente para acabar con su dictadura de un sólo golpe. Tras un tiempo en tensión, los sudores fríos surcaban  nuestros rostros y en lapsus al captar la silueta de nuestro objetivo nos abalanzamos sobre él y nada más recuerdo de aquello.


  Luego desperté en un yermo desolador, no había rastro de vegetación alguna, el vasto terreno se alzaba más de lo que podía ver. Anduve un tiempo hasta que divisé 2 coches y me acerqué con miedo a ellos. El ladrido de un perro anunció mi llegada y un hombre salió del auto y me preguntó de donde salía, no recordaba nada. Tras el desconocido, una mujer de piel morena me dió la bienvenida. Por lo visto se sitiaron allí para descansar en pos de busca de vida, por la noche cené con ellos y bajo las estrellas, mientras me hallaba tumbado observándolas la mujer se acercó a mi y me dijo que no me preocupase al unísono que las pocas personas que había en los coches lanzaban cohetes artificiales.


  ¿Qué pasó con los demás del refugio, mis amigos...se encontrarían bien? nunca lo sabré pues ese mundo que se creó en mi mente aquella noche se desvaneció tras despertarme, muchas veces me gustaría guardar la partida de mis sueños y continuarla noche tras noche. ¿Cómo es posible recrear personas que jamás se haya visto, como si tuvieran vida propia, una personalidad ajena a tu creación, cuán grande es la mente? Incluso se llega a echar de menos alguno de esos personajes, les deseo lo mejor en ese mundo paralelo de mi mente y aquí acaba mi sueño.